Si eres de los que ha vuelto al trabajo presencial, este post es para ti. ¿Consideras que tu oficina es sostenible? Las oficinas son lugares en las que todos pasamos una cantidad de tiempo considerable. Por eso, cabe preguntarse el impacto que tienen nuestros hábitos diarios en el medio ambiente. Es más, una actitud más ecológica y sostenible puede ayudar a reducir gastos. Para conseguir esto es necesaria la implicación de todos los miembros de la empresa, de manera que los comportamientos individuales se transformen en una repercusión global. Además, para contribuir a esta participación pueden establecerse un sistema de escucha que permita participar a todos los empleados.
Elementos de la oficina sostenible
Una zona de reciclaje es un ‘must have’ de casi toda oficina sostenible, pero no está de más recordar la importancia de tener un espacio determinado para este proceso. Los contenedores deben estar separados en función de los residuos y, por supuesto, ser accesibles a todo el mundo. Establecer puntos concretos de reciclaje facilitará el proceso. La cafetería, la zona de máquinas de café o las áreas de descanso pueden ser buenas opciones.
Si hay algo incluso más básico que la zona de reciclaje es la impresión de documentos. No hay duda de que el uso del papel es cada vez más mínimo en las empresas, y más tras la crisis del coronavirus. Digitalizar todos los documentos o presentaciones es enormemente beneficioso. Pero ¡ojo! el envío de correos contamina. Sí, has leído bien. Acumular correos en la bandeja de entrada supone que los data centers trabajen y consuman una mayor cantidad de energía que la que usualmente necesitan. El envío de correos electrónicos contribuye a la huella de carbono. Al enviarse un correo se emite una estimación baja de carbono, alrededor de 0,3 gramos de CO2 cada uno. ¿Qué puedes hacer frente a esto?
- Eliminar correos de más de tres años.
- Si la información que tienes almacenada es verdaderamente importante, expórtala a un disco duro.
- Si puedes explicarte en un correo no lo hagas en dos.
Ahora mismo, es probable que tengas encendida la calefacción en tu espacio de trabajo. Lo ideal, es que la temperatura en invierno no rebase los 20 grados, y en verano los 24 grados. Las recomendaciones sanitarias indician tener la ventana abierta para ventilar, por lo que tratar de regular la temperatura adquiere ahora una mayor relevancia.
Por último, el consumo de luz. Muchas empresas han entendido que mantener las luces encendidas sin que haya nadie dentro trabajando, no es un indicativo de buena imagen. Más allá de eso, en el día a día se debe aprovechar al máximo la luz natural. Usar bombillas led o de bajo consumo es otra de las opciones sostenibles. Y por supuesto, si hay zonas de reuniones que no se usan a lo largo de toda la jornada, debe existir la opción de apagar las luces.
La hora de la comida
Es uno de los momentos del día en el que se generan más desechos. Botellas de plástico, vasos de café o servilletas son algunos de los residuos. En primer lugar, opta por tuppers de vidrio. Son la opción 100% reciclable, segura y para mayor ventaja, son más fáciles de limpiar. Su durabilidad es mucho más larga que los de plástico.
Los cubiertos son otra de las elecciones importantes. Llevarte los que tienes en tu casa es una opción sostenible y económica. Si esto no te convence, existen packs de cubiertos fabricados con materiales sostenibles como el bambú, que es totalmente biodegradable. Pero, sin duda, el mayor foco de contaminación durante la comida son las servilletas. ¿Cuántas gastas a lo largo del día? No lo dudes y pásate a las servilletas de tela. Existen múltiples diseños y tamaños que estamos seguros de que encajarán contigo.
En UCI ya aplicamos medidas respetuosas con el planeta, ¿te animas a hacer tu oficina sostenible?