La llegada de la Inteligencia Artificial (IA) generalista está generando mucha incertidumbre acerca de cómo sacarle partido y demostrar cómo nuestra experiencia y conocimientos aportan mucho valor a las empresas. ¿Qué competencias son las que destacan tras la irrupción de la IA?
Especialización
La IA generalista no puede sustituir el conocimiento especializado en un sector determinado, no puede hacer previsiones, un profesional percibe detalles constantemente y es quien conoce cómo usar las últimas herramientas y soluciones de nuestra especialidad. Este conocimiento permite aportar valor y contexto más allá de lo que propone la IA.
Capacidad de innovación
Es la competencia que nos hace ser más competitivos. La IA no puede sustituir el pensamiento creativo y la capacidad de innovación, competencias que aportan mucho valor en las personas.
Agilidad y capacidad de toma de decisiones
Por último, es diferenciador tener una clara capacidad para tomar decisiones rápidas y ágiles para adaptarse a un mercado cambiante. En un mercado altamente incierto, las empresas necesitan profesionales y directivos que estén orientados a un objetivo y que se adapten rápidamente y que sepan tomar decisiones ágiles.
Empatía y habilidades sociales
La empatía y las habilidades sociales son críticas en muchas profesiones, sobre todo en las que tienen que ver con la atención al cliente. La capacidad de interactuar con otros seres humanos, comprender sus necesidades y responder adecuadamente a sus emociones es una habilidad que la IA todavía no ha podido replicar completamente.
Habilidades de liderazgo
Aunque la IA puede proporcionar información y sugerencias útiles para la toma de decisiones, la capacidad de liderazgo, inspirar y motivar a un equipo es una habilidad que todavía es exclusiva de los trabajadores humanos.
Flexibilidad y adaptabilidad
Los equipos humanos pueden adaptarse y ajustarse a situaciones cambiantes o inesperadas con mayor facilidad que la IA. Esto es especialmente importante en trabajos donde la creatividad y la resolución de problemas son críticas.
Es verdad que las habilidades pueden variar dependiendo del trabajo y del nivel de complejidad y sofisticación de la IA. Sin embargo, en general, estas las habilidades son algunas de las principales competencias laborales que todavía diferencian a un gran equipo humano de la IA.