Con la llegada del verano, muchos españoles se van de vacaciones y aprovechan esta situación para plantear reformas en su vivienda habitual o segunda residencia. Además, con la pandemia se impulsó el interés por las reformas para mejorar en el confort el hogar tras pasar tanto tiempo en él. También hicimos un estudio en el que supimos que el 20% de los propietarios sería más feliz en su vivienda si mejorase su confort.
Según la Asociación Nacional de Distribuidores de Cerámica y Materiales de Construcción (Andimac), seis de cada diez españoles quieren hacer reformas en su hogar. Este interés que se verá pronunciado en los próximos meses por la inyección de capital público para fomentar la reforma de viviendas particulares en los tres próximos años, para lo que se destinará un total de 6.820 millones (procedente de los fondos europeos y los Presupuestos Generales del Estado).
Reformar para la ahorrar energética
El objetivo es reformar 500.000 viviendas en este periodo para contribuir a la mejora del envejecido parque inmobiliario español, con más de la mitad de las edificaciones construidas antes de 1980 y un 17% en los años 60. No es de extrañar, por tanto, que 4 de cada 5 edificios en España sean ineficientes energéticamente. De hecho, la vivienda es la tercera causa de emisiones de CO2 (tras el transporte y la industria), principalmente por el consumo energético (40%), de materias primas (40%) y de agua potable (14%).
El verano suele ser un buen momento para iniciar estas obras de rehabilitación y reformas. Así mejoraremos el acondicionamiento y habitabilidad de los hogares y convertirlos en inmuebles eficientes y sostenibles. ¿Cuáles son las más indicadas? ¿Qué presupuesto es necesario? ¿Con algunas reformas sería suficiente o siempre es necesaria una rehabilitación integral?
Expertos de nuestro canal Creditos.com, especializado en préstamos para la reforma y rehabilitación de viviendas, ha elaborado una guía para tratar de responder a los interrogantes habituales a la hora de plantear una reforma durante el periodo estival y cuáles son la más indicadas para mejorar la eficiencia y el confort.
Sistemas de calefacción más eficiente
El verano es una buena época para cambiar los sistemas de calefacción tradicionales. Gracias al buen tiempo, ya que Es una de las principales partidas de gasto energético (32%) y supone un gasto medio anual de 1.300 euros. Mientras, en las denominadas casas pasivas (eficientes energéticamente), con sistemas de calefacción eficientes, el coste anual en calefacción gira en torno a los 90 euros, un 90% más económico.
En este sentido, la apuesta por sistemas de calefacción basados en energías limpias y renovables fomenta la eficiencia energética. La sustitución de calderas tradicionales por una de condensación o bomba de calor reduce hasta un 26% de gases contaminantes. Esta medida será obligatoria en algunas zonas como en la Comunidad de Madrid, ya que la Ordenanza del Aire y Sostenibilidad (OCAS) prohibirá las calderas de carbón central desde el 1 de enero de 2022.
Cambiar ventanas
Aproximadamente un 20% de la energía de la vivienda se filtra a través de las ventanas (sobre todo en los cierres). Instalar ventanas con doble acristalamiento y contar con carpintería con rotura de puente térmico es primordial para aumentar la eficiencia energética.
Aislamiento de cubiertas y paredes
La zona del tejado es la que más se deteriora y envejece en una vivienda por su exposición al frío, el viento y la lluvia. El verano es una de las mejores épocas para acometer esta reforma. Consiste en añadir un aislamiento térmico en la cubierta para un mayor confort y contribuye a un ahorro energético de hasta un 35%. En cuanto a las paredes, instalar una cámara de aire evita las pérdidas de calor y frío y ahorrar hasta un 35%. Así como el SATE, un sistema de aislamiento térmico exterior muy fácil de instalar y adecuar al diseño preexistente de un edificio.
Renovar el color de las paredes
Es buena idea cambiar el color de las paredes del interior de las viviendas y reparar los desperfectos y humedades. Aunque es una reforma de tipo menor, mejora también las condiciones de habitabilidad. Para las paredes exteriores y techos, apostar por pinturas térmicas es un buen truco para un aislamiento de hasta un 25%.
Instalación de placas solares para el autoconsumo
La subida del precio de la electricidad hace que sea buen momento para optar por sistemas de energía eficiente y de autoconsumo. Un ejemplo es la instalación de paneles solares. A pesar de la alta inversión que supone, ofrece una gran rentabilidad, con un ahorro aproximado del 50%. Por ejemplo, un coste de 5.000 euros en paneles solares se amortizaría en cinco años, con un ahorro del consumo de 1.100 euros al año.
Reformas de fontanería
La sustitución de la grifería, el cambio de tuberías y la apuesta por reductores de caudal puede ahorrar en la factura del agua entre 30 y 200 euros.
La apuesta por algunas de estas reformas en el hogar durante este periodo estival conducirá a mejorar el medio ambiente, la eficiencia energética y también nuestra salud y calidad de vida. Así como al ahorro en el gasto doméstico y al incremento de la valoración del inmueble. No es indispensable una rehabilitación integral. Con mejorar algunos factores será un importante avance a favor de la sostenibilidad en el hogar.
Contar para estas reformas con profesionales expertos ayudará a obtener información en cuanto a licencias, documentación y calidad de los materiales. Sin olvidar además del asesoramiento financiero para costear estas obras.